Reseña: Battle Royale de Koushoun Takahami

Hace poco culminé la lectura del libro Battle Royale, del autor Koushon Takahami, una novela a mi parecer interesante, que plantea un Japón gobernado por un dictador, donde se prohíbe todo lo proveniente de los países capitalistas (productos, música, libros, etc.) y se sacrifican las libertades personales, quedando la población a merced de los funcionarios del gobierno. Pese a ello, la sociedad es altamente eficiente y productiva, por lo cual las personas se conforman y toman una actitud sumisa ante la dictadura.

En este contexto, se utiliza como instrumento de control social el Battle Royale, un evento que consiste en la elección aleatoria de un salón de preparatoria, cuyos estudiantes son llevados a una locación provistos de armas para que se maten entre ellos hasta que sólo quede un ganador. 

El objetivo principal que el gobierno busca es generar desconfianza en los ciudadanos, a fin de impedir que éstos se organicen y se rebelen, reforzando la imagen de que el gobierno es absoluto, puesto que incluso hijos de altos funcionarios deben participar de la matanza si es que su clase es elegida y cualquier mínimo atisbo de oposición de sus amigos o familiares es cruelmente reprimido.

Para garantizar que ocurran los enfrentamientos entre compañeros de clase, se les colocan collares detonantes, los cuales se activan en caso de que intenten quitárselos, salgan de la zona permitida (la cual se reduce con el paso del tiempo) o que nadie muera en un plazo de 24 horas (en este último caso, se detonan los collares de todos). Dadas estas reglas, los jóvenes se ven forzados a movilizarse y enfrentarse unos a otros. Este evento se lleva a cabo unas 50 veces al año, es de conocimiento público y los ganadores son reconocidos por los medios, reciben una pensión vitalicia y se les ofrece una bacante en las fuerzas especiales del ejército.

La novela se enfoca en un grupo de personajes miembros de una clase elegida para el Battle Royale, y cómo estos afrontan el hecho de estar en un juego donde deben asesinarse entre ellos; abarcando temas como la confianza, las relaciones interpersonales durante la juventud y la influencia de los traumas de la niñez sobre nuestro razonamiento y conducta actuales.

Entrando en detalle, la obra describe en primer lugar los romances de los chicos: amores sinceros, no correspondidos e incluso ocultos; en segundo orden, se tocan temas del pasado de los personajes: momentos buenos, malos, feos y terribles; como tercer punto, se trata sobre los dilemas morales y reflexiones de los jóvenes de participar en el juego y, finalmente, los enfrentamientos. Estos últimos inician de forma realista, con muchachos asustados que no saben manejar un arma, y progresivamente se van tornando sumamente cinematográficos, existiendo incendios, balaceras, chalecos antibalas, granadas, trincheras, metralletas, explosiones inmensas, persecuciones en auto e incluso ¡una lluvia de gas venenoso!

Cabe señalar, que la película del 2000, dirigida por Kinji Fukasaku, es una adaptación libre de la novela y presenta varias diferencias, principalmente, en el hecho de que el Battle Royale se realiza porque los jóvenes ya no respetan a sus mayores; siendo el vandalismo y el desempleo los factores que conducen a la crisis social, la cual desemboca en medidas radicales del gobierno. Sin embargo, la película me gustó mucho y me parece interesante el nuevo enfoque que le dieron, además de que gracias a esta película entendí porque hay tantas personas con fantasías sobre colegialas niponas. 

En conclusión, considero que la novela es entretenida e interesante, más allá de quedarse con el enfrentamiento estilo Fortnite, te lleva a reflexionar sobre temas más trascendentales como la libertad, la lucha social y el anhelo intrínseco de poder vivir plenamente. Si alguien dispone de tiempo para leer 600 páginas, se la recomiendo totalmente; yo sé que no es Los Miserables o Ulises, pero vaya que pasé un momento agradable leyéndola.